Todos los días observo el impacto positivo que la música puede hacer en los estudiantes. Las transformaciones musicales se aprecian de muchas maneras ya sea por el crecimiento y desarrollo en el instrumento o por la felicidad que tocar piano le proporciona al estudiante. Pero la siguiente historia da a conocer una transformación que va más allá…
Preparábamos a participar en nuestro recital de piano a un estudiante muy talentoso. Sin embargo, en clases le costaba seguir las instrucciones de la maestra. No siempre había obediencia de su parte y podía ser un desafío tocar lento cuando se le pedía. Ante esta actitud se le mencionó que la experiencia para la cual se estaba preparando era única y que muchas personas más desearían tener una experiencia así. A pesar de esto continuaba igual hasta que llegó el momento esperado.
Era el día del recital de piano y la transformación de nuestro estudiante era evidente, su presentación musical fue maravillosa. Tocó el piano lleno de seguridad y sereno demostrando a su maestra que seguía las directrices que le había sugerido en las clases. Su cambio del salón de clases al escenario del recital fue muy impactante. De ahí en adelante su actitud en clases era otra: un estudiante dócil, que sigue instrucciones y sabe comunicarse con su maestra aplicando sus consejos musicales. Sin duda alguna la música cambia vidas y las transforma. Nuestro recital fue un medio no solo de exponer a los estudiantes musicalmente sino a mejorar en ámbitos personales.